Historia de Grecia

 

Las ciudades-estado

 

Poco a poco comienzan sin embargo a agruparse las chozas de los genos; los caseríos aumentan, pero, sobre ser poco importantes no están suficientemente adheridos al suelo.

 

Grecia estaba formada por una serie de ciudades estado independientes, gobernadas por oligarquías aristocráticas, el aislamiento geográfico impuesto por el territorio que ocupaban y la necesidad de agruparse para defenderse de las invasiones explicaba la formación por los griegos de estas  ciudades estado. Aunque eran independientes, a menudo se unían en una liga dentro de la cual la más importante acababa por imponerse. Las dos polis más importantes fueron Atenas y Esparta. Esparta cuido por encima de todo su poderío militar descuidando el arte y las actividades económicas, redujeron a los vencidos a la esclavitud (ilotas) la población se componía de Dorios, Periecos e Ilotas; los primeros conservaron supremacía mediante las armas.

 

Esparta contó con dos reyes de poder ilimitado y veintiocho ancianos guiados por cinco Eforos, que formaban el senado, el cual  monopolizaba todo el poder volviéndose  verdaderos amos del estado.

 

La guerra era el único móvil de la educación, Esparta quiso imponer su fuerza desde un principio, Mesenia le resistió heroicamente, pero fue vencida, después organizó una liga en Peloponeso, de la cual fue jefe.

Los ciudadanos espartanos gozaban de enormes privilegios sobre los indígenas sometidos (iliotas y periecos). Estaban gobernados por reyes de familias diferentes, que se transmitían el cargo por herencia, la monarquía se mantuvo en Esparta hasta la total decadencia de la polis.

 

Atenas la capital del Atica careciendo de militarismo se convirtió en el motor del mundo Griego. Desarrolló el modelo más perfeccionado  democracia limitada y puso  las bases de la sociedad Occidental. Sus habitantes proclamaron la independencia, la libertad y la igualdad.

 

El gobierno comprendió: los Arcontes, el Areopago y el consejo de los cuatrocientos, dividió el pueblo en cuatro clases según su fortuna. Las leyes de Solón suavizaron las costumbres i aseguraron la libertad  

 En los primeros siglos del primer milenio, Atenas tuvo un papel secundario con una economía basada en la agricultura y el pastoreo. A partir del siglo VI el desarrollo del comercio hizo posible su futura importancia. Cuando Atenas inicio su decadencia, Esparta no pudo sustituirla.

Junto a estas dos grandes ciudades destacaron también Samos, Mileto, Delos, Argos Epiduro, Corinto, Egina, Calcis, Eritrea y Tebas.